Forte de Gandra

El fuerte está realizado íntegramente en tierra mezclada con cantos rodados, se compone de un cuadrilátero regular con baluartes llenos en las esquinas y con medias lunas protegiendo cada una de las cuatro cortinas, con gola triangular y parapeto con banqueta. El fuerte está rodeado por un profundo foso que en algunas zonas alcanza los 4 m, que rodea también las medias lunas. Todas estas estructuras están delimitadas a su vez por una contraescarpa que dibuja una figura estrellada de seis puntas, que se compone de camino cubierto y parapeto, cuyas puntas NNW y NNE están cortadas con motivo de la construcción de la carretera que bordea el fuerte. El parapeto NW de la media luna NNE presenta un rebaje que se corresponde con la entrada al fuerte, al que se accedía, primero a través de la media luna y, posteriormente, por un paso elevado de tierra sobre el foso que conducía a un acceso en la cortina NNE del reducto.

Estas estructuras, aunque se conservan en bastante buen estado y no han sido alteradas por la construcción del polígono industrial que se localiza en el entorno del fuerte, han sido objeto de alguna destrucción reciente relacionada con la práctica de motocross. Cada año se ven más afectados los parapetos y las medias lunas por este motivo, sobre todo en la zona NW del fuerte donde el desnivel es más pronunciado.

Sin embargo, sí ha sido destruida una estructura que se situaba al SE de la fortificación, de forma triangular, compuesta por un parapeto y un foso, que hemos identificado como una media luna o plataforma adelantada y que se localizaba en una de las zonas más vulnerables del fuerte debido a la escasa defensa natural, ya que nos encontramos ante una zona muy llana. Esta afección se documenta a partir de 2009 cuando desaparece esta estructura en la fotografía satelital. Actualmente la fortificación es de difícil acceso porque se encuentra ocupada por vegetación de monte bajo, sobre todo tojo.